A punta de flechas rescatan a detenido con once paquetes de leche

A punta de flechas rescatan a detenido con once paquetes de leche

En  techos de plástico y paredes de cartón residen los indígenas que denuncian arremetidas

El pasado lunes de carnaval  aproximadamente a las 5:30 de la tarde la Guardia Nacional realizó una requisa “selectiva” a los habitantes de las comunidades indígenas aledañas a la población de Puerto Páez, parroquia Codazzi del municipio Pedro Camejo, que frecuentemente viajan hasta San Fernando y se trasladan en transporte público para adquirir los productos de la cesta alimentaria y detergentes debido a la escasez que se siente con más fuerza en esta región fronteriza.

La tensión comenzó a llegar cuando se efectuó la detención de un ciudadano que iba hacia su casa en el sector La  Esperanza. “Fue interceptado de manera sorpresiva por una comisión de la GNB que se desplazaban en un vehículo  Toyota chasis largo y de inmediato fue esposado, agredido físicamente y detenido frente a su esposa, junto con su moto y 11 paquetes de leche de 900 gramos”, contó Eduardo Gaitán, tío del aprehendido.





Al enterarse la población de lo sucedido y ante la posibilidad de que dejaran al joven a disposición del Ministerio Público, se reunieron más de 100 personas entre jóvenes, adultos y mujeres con flechas, entre otros elementos artesanales, y se dirigieron al Comando. Denuncian que fueron recibidos violentamente, por lo que los manifestantes respondieron en defensa con las flechas logrando penetrar a la sede castrense, provocando que los efectivos huyeran rápidamente hacia el interior del comando y cerraran el portón externo.

En medio del caos, ya entrada la noche, un efectivo no identificado salió con las manos levantadas gritando que estaba desarmado y que iba a conversar. En medio de la situación se logró “el rescate forzoso” del indígena detenido y la destrucción parcial de un vehículo de la GNB, al cual le dejaron los vidrios rotos y espichados los cauchos. Debido a la salida del capturado se evitó que encendieran la churuata, lugar de recibo del comando.

Según el sobrino de Gaitán, manifiesta que “un funcionario físicamente identificado le solicitaba un monto de 50 mil bolívares por su libertad”, supuestamente mientras le apuntaba, además denuncia que fue agredido en numerosas ocasiones.

 

“Nos cansamos”, dicen los indígenas

“Nos cansamos de tanta agresión, no vamos a permitir que nos sigan convirtiendo en objeto de maltrato verbal y físico, de discriminación y racismo social, de persecución y pesquisas selectivas con objetos de extorsión, por ser pueblo humilde y desposeído económicamente, por vivir en ranchos de techo plástico y paredes de cartón y no en quintas, por luchar día a día por conseguir un sustento diario”, expresaron los molestos pobladores, de quienes Gaitán fue el vocero.

Manifiestan que no aguantan más hostigamientos. Aseguran que les retienen las motos y les piden dinero a cambio, dicen que similar situación se presenta con los productos que adquieren y no le dan acta de retención, por lo que creen que se los efectivos actuantes se quedan con lo decomisado. “Tienen dos motos en ese comando que están a disposición de fiscalía con argumentos falsos y mentiras. Ellos las utilizan para sus diligencias y las tienen deterioradas”, aseguran.

Señalaron que los cuerpos de seguridad no tienen un sentimiento de respeto y reconocimiento por a los pueblos originarios. “Que nadie se equivoque si han pensado que pueden hacer con nosotros los indios lo que se les de la gana, si alguno de nosotros tiene que morir será un caído mas que mostrará la historia como un guerrero héroe que cayó por la causa de una raza y la vida”, manifestaron enfáticamente.

Aprovecharon la oportunidad para exigirles al gobernador y a la Ministra Indígena para que se reúnan con esta comunidad “lo más pronto posible”. Agregaron que están a la expectativa de cualquier “ataque violento” e indican que si no hay respuesta regional se trasladarán hasta Caracas para exigir sus derechos.