Médicos del Hospital Central de San Cristóbal se declararon en asamblea permanente, y decidieron que, si bien no suspenderán las cirugías electivas, no están dadas las condiciones para practicarlas y en tal sentido solicitarán las operaciones, acudirán al quirófano y si no se cuenta con los insumos necesarios no intervendrán a los pacientes y dejarán constancia de lo ocurrido, con todas las fallas en medicamentos, materiales y equipos que se tengan en el momento, publica La Nación.
Los médicos, algunos enfermeros y trabajadores de otras áreas del Hospital Central se reunieron nuevamente este lunes -3 de agosto-, para analizar la situación de este recinto, y reiteraron que no cuentan con los materiales mínimos para trabajar, incluso los récipes, las historias médicas y los informes deben escribirlos en trozos de papel improvisados.
“Las autoridades se comprometieron a asignar funcionarios, bien sea de la Guardia Nacional o de la Policía, para que custodiaran la Emergencia, en vista de las amenazas que recibe el personal por parte de familiares desesperados de los pacientes; sin embargo, este lunes llegamos y en el sitio no había ningún funcionario, es decir, el compromiso no se cumplió”, dijo el médico.El doctor Edwin Omaña, jefe del servicio de Emergencia del Hospital Central de San Cristóbal, indicó que el pasado viernes -31 de julio-, en reunión con la secretaria general de Gobierno, Miriam Febres; el presidente de Corposalud, Freddy Prato, y el secretario de Seguridad Ciudadana, Ramón Cabezas, les habían ofrecido darles seguridad, al menos en el área de Emergencia.
A través del voto, los médicos acordaron no suspender las consultas, pues consideraron que es un deber ético y moral brindarle la atención al paciente y se sienten comprometidos con su labor; sin embargo, señalaron que en las consultas se les informará a las personas de la situación de grave escasez de insumos que tiene el centro hospitalario y las dificultades para hacer las intervenciones quirúrgicas.
También comenzarán a levantar informes en cada servicio, donde dejarán constancia de todos los insumos que solicitan para atender a los pacientes y les responden que no hay en existencia, pues -afirman- a diario son decenas de personas que se ven perjudicadas por esta falta de dotación que tiene la institución.Igualmente, decidieron que se mantendrán en asamblea permanente para revisar la situación y tomar las decisiones que sean necesarias, las cuales culminarán con la protesta activa en la avenida Lucio Oquendo, donde a diario mostrarán pancartas y conversarán con los transeúntes para explicarles la crisis de insumos.
Una vez más, al culminar la asamblea, los médicos salieron a la calle e interrumpieron el tráfico de forma intermitente, al considerar que, si ya agotaron las vías de diálogo con las autoridades, ahora solo queda esperar las soluciones y seguir llamando la atención de la población.
Reiteraron las necesidades del hospital, que van desde papelería, materiales de higiene y limpieza, alimentos para los pacientes, medicamentos -desde los más básicos-, fórmulas lácteas, inseguridad, déficit de personal, material médico-quirúrgico, numerosos equipos dañados, ascensores fuera de servicio, salarios miserables; y una vez más exigieron respuestas lo antes posible por parte del Gobierno regional o nacional. (LS)