El día de ayer, los gritos y las largas colas fueron los protagonistas en varias carnicerías de Anaco. ¿El motivo? Cinco comercios de la ciudad gasífera expendieron carne roja a precio regulado, publica El Tiempo.
Desde las 5:00 am, los consumidores se apostaron en las afueras de estos negocios para tratar de ser los primeros en comprar. “Hay que aprovechar cuando venden la carne barata, porque si no, no podremos comerla nunca”, dijo Luis Sinfontes.
En las carnicerías La Llanerita y Nelly, en los bodegones y exquisiteces Hamud y Javier Carrasco y en Inversiones Fashion repartieron números para que los usuarios adquirieran el rubro. La situación fue inspeccionada por funcionarios de la Superintendencia de Precios Justos (Sundde).
La carne de primera fue ofrecida a 250 bolívares, la de segunda a 220 bolívares, mientras que la de tercera, lagarto, hueso y costilla a 160 bolívares.
“Yo llegué primero”, decían varios consumidores mientras esperaban y entregaban su cédula de identidad para poder ser atendidos.
Los carniceros manifestaron que sólo vendieron el producto a los inscritos en la Superintendencia Nacional de Silos, Almacenes y Depósitos Agrícolas (Sada).
Nelly Figuera, dueña de un local ubicado en el mercado municipal, aseguró que sólo recibió cinco reses en su negocio. “180 personas fueron atendidas”, dijo.
Debido a la gran cantidad de gente que esperaba el turno para comprar, Figuera decidió no subir la santamaría. “Pasarán de uno en uno”, puntualizó.
Jesús Matute, encargado de la carnicería La Llanerita, ubicada en la calle Carabobo, manifestó que a su local llegaron unas 10 reses.
Contó que es la segunda vez en el año que recibe carne roja para venderla a precio regulado. “Me informaron que supuestamente el martes que viene llegará otro lote”.
Matute aseveró que 200 personas compraron el rubro, “Vendimos sólo cinco reses y las otras serán vendidas hoy”.
Matute decidió abrir su negocio. “Entran cinco, salen cinco”, dijo.
Por combo
En las diferentes carnicerías ofrecieron un combo de un kilo de lagarto, cortes de primera y segunda, costilla y hueso valorado en 1.000 bolívares.
“La carne como llegó voló. La gente por comprar barato viene a la hora que sea”, manifestó Roberto Rodríguez.
Para Samira Guzmán el precio de la carne era una sorpresa.
“Estoy desde las 5:30 de la mañana y seguiré aquí hasta comprar. Tengo el número 149”.
Molestia
Quienes se encontraban haciendo cola temprano para comprar carne ro- ja, manifestaron su molestia debido al tiempo que tardaron los comerciantes en expender el producto. “Dijeron que comenzarían a vender a las 9:00 am y son las 10:00 y seguimos aquí”.