Contexto nacional / Septiembre 2015 / Cómo usted sabe, en Diciembre de este año, se realizarán elecciones para elegir a la nueva Asamblea Nacional, ¿Piensa usted votar? INDUCIDA
Las estrategias electorales empiezan en la biblioteca, es fuente de información, sobre todo en lo referente a los datos histórico político del país, región o ciudad que se desea estudiar, de los propios manuales y estudios de elecciones, de los mapas electorales, de los resultados obtenidos en las anteriores elecciones o de encuestas. Candidatos o candidatas, no olviden nunca que el diseño de las estrategias de su campaña electoral, se inicia visitando las hemerotecas, elemento éste muy significativo para que la memoria de los políticos, propios y extraños, no les juegue una mala pasada. Recordemos que uno es dueño de sus silencios y esclavo de sus palabras.
En una campaña electoral todas las decisiones finales son y serán parte de las estrategias que se orientan a buscar únicamente votos, no importa el medio o las manera como se impongan. “No hay campaña sin estrategia, no hay estrategia sin estudio de opinión”. La estrategia es el componente fundamental de la organización de una campaña electoral. Saber qué hacer, dónde, cómo y con quien es el objetivo a desarrollar aquí. Estrategia es pensar, es construir ideas, no hacer. A eso le llaman táctica. La estrategia se concreta a través del Plan de Campaña, a veces conocido como manual de campaña. Éste es un documento escrito, no público y solo conocido por poca gente dentro del comando de campaña, creado para cumplir la misión de definir las estrategias que direccionan hacia el colectivo electoral.
Para explicar que es una estrategia de campaña, quisiera establecer analogías entre el concepto militar y las campañas políticas, esta última mucho más pacíficas, claro está, a pesar de que como dijo Winston Churchill, “la política es más peligrosa que la guerra, porque en la guerra sólo se muere una vez.
En el mismo orden de las ideas en el campo electoral, entrando en materia, la motivación a votar y la abstención se combaten con estrategias en todas sus escalas, estos son dos escenarios complejos que todo comando de campaña debe tener presente, si un aspirante lidera con una significativa brecha a su favor y la gente sale a votar, seguramente le estará dando jaque mate a su oponente, ahora bien, si un candidato está pendiendo por una brecha importante y la abstención baja, estaremos hablando de incertidumbre en su victoria, algo relativo. En un momento electoral la motivación y la abstención son el tema fuerte o mejor dicho los desafíos que debe resolver todos los jefes de campaña o consultores.
En correspondencia con lo anterior, la tendencia histórica de la abstención en las elecciones parlamentarias en nuestro país se mueven entre 55% y 50%, un candidato a diputado que puntee en las encuestas, tenga una brecha de hasta 10%, por el corto tiempo de la campaña pudiera proyectarse su triunfo, sin embargo, todo va a depender de la motivación de las personas a votar y la naturaleza política del circuito electoral y la maquinaria política – electoral que tenga su comando. Cada circuito electoral merece un tratamiento especial en lo electoral. Problema de cultura.
Motivación a votar y abstención, la primera se ataca a través de estrategias y diversos análisis facticos y científicos para focalizar sus fisuras – crisis económica y social – y la segunda se puede resolver con presupuestos epistemológicos de la psicología social y la violencia que apunten a desmotivar a la gente de ir a votar el próximo 6/D.
Hasta ahora, sólo cuatro empresas entre ellas Hercon, han hecho públicos sus resultados de las encuestas de voto popular para las elecciones parlamentarias. Todas dan una brecha a la oposición de dos dígitos; La ventaja promedio en todas las encuestas es 28,3 puntos porcentuales, más que suficiente a superar el umbral de 18,1 puntos necesarios para reunir la mayoría calificada de 2/3, de acuerdo a nuestras estimaciones. Es decir, 28,3 puntos de brecha, más las razones que conectan con la motivación que existe entre los venezolanos que desean sufragar el 6D pareciera indicar que la gran derrotada será la abstención… no, obstante, los números con la revolución son dinámicos hasta cambiantes. Pero, la gente se siente motiva a votar no precisamente para refrendar el actual orden de cosas y se puede observar en la intención de voto por bloques y filtrando a los NI – NI.
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