Un admirador de Trump y una maestra latina entre eventuales jurados de El Chapo

Un admirador de Trump y una maestra latina entre eventuales jurados de El Chapo

Un gran admirador del presidente Donald Trump y una joven maestra latina que mira narconovelas están entre los potenciales jurados que decidirán la suerte de Joaquín “El Chapo” Guzmán. | Don EMMERT / AFP

 

Un gran admirador del presidente Donald Trump y una joven maestra latina que mira narconovelas están entre los potenciales jurados que decidirán la suerte de Joaquín “El Chapo” Guzmán, el mayor capo narco jamás juzgado en Estados Unidos.

Por Laura Bonilla / AFP





Pero otras cinco personas fueron descartadas porque temen represalias del exjefe del cártel de Sinaloa, así como un potencial jurado que sufrió un ataque de pánico y otro nacido en Colombia que es un “fan” del mexicano y pidió su autógrafo.

El juez Brian Cogan y abogados de ambas partes interrogaron en dos días a 74 potenciales jurados, y escogieron ya a unos 40 para el proceso contra El Chapo, de 61 años y acusado de enviar a Estados Unidos 155 toneladas de cocaína a lo largo de 25 años. Aún deben elegir a los 12 titulares y seis suplentes.

Un autógrafo de El Chapo

Uno de los potenciales jurados descartados nació en Medellín pero vive hace 20 años en Nueva York. Preguntó a un guardia de la corte si era posible conseguir un autógrafo de El Chapo, durante años el hombre más buscado por Estados Unidos tras la muerte de Osama Bin Laden.

Un fiscal del gobierno le acusó de estar “enamorado” de El Chapo, y la defensa intentó infructuosamente que el juez lo retuviese. “¿Por qué pidió un autógrafo del acusado?”, le preguntó el juez. “Porque soy un poco su fan”, respondió el hombre, que fue entonces eliminado de la lista de potenciales jurados.

El Chapo, que vestía este martes un traje negro, camisa azul esta vez prendida hasta el último botón y corbata escocesa en tonos azules, pareció sorprendido y sonrió. Otras tres personas dijeron temer por su vida y fueron descartadas este martes, lo mismo que ocurrió el lunes con dos mujeres.

Para evitar riesgos, los nombres de los jurados se mantienen anónimos, y cada día serán escoltados por alguaciles armados a la corte. El juez dijo que una de ellas le dijo llorando sin parar que su madre le había dicho que si era jurado, deberían mudarse y buscar una nueva casa. Otra contó que vio un filme en el que mataban a un jurado, y buscó en Google “El Chapo matar jurado”. Halló una historia en la que éste prometía que no lo haría. “Incluso esa afirmación me dejó bastante ansiosa”, sostuvo antes de ser eliminada.

También fueron descartados una persona que tuvo un ataque de pánico en la sala de jurados y fue trasladada al hospital, un imitador de Michael Jackson por temor a que sea identificado, y un hombre al que le gusta un sándwich llamado “El Chapo”, porque dice que en el almacén donde compra esta rosquilla podrían reconocerlo.

Fue eliminado asimismo un mexicano que primero dijo no estar familiarizado con El Chapo, pero que luego afirmó que había mirado la serie sobre el capo narco realizada por Univisión y Netflix.

Aún en liza

Retenido como potencial jurado quedó un hombre blanco de mediana edad que asegura que Trump es la persona que más admira. Consultado por el juez sobre si tiene prejuicios contra los mexicanos, respondió: “No creo que el presidente sea para nada un tipo racista”. “¿No cree que él sea un ‘bad hombre’?”, le preguntó Lichtman, señalando a El Chapo. El hombre aseguró que no tendrá en cuenta nacionalidad o religión a la hora de decidir su veredicto.

Otro jurado potencial es una joven maestra latina que mira la narconovela colombiana “El cartel de los sapos” y un afro-estadounidense que admira a la demócrata Alexandria Ocasio-Cortez, que este martes podría ser electa en Nueva York como la congresista mujer más joven de Estados Unidos, con 28 años.

Consultado sobre si el llamado de Ocasio-Cortez a eliminar la policía migratoria ICE podría influir en su veredicto, aseguró que no. Se estima que el proceso de El Chapo, autor de dos espectaculares fugas de prisiones mexicanas y extraditado a Estados Unidos hace casi dos años, durará más de cuatro meses.

Si es hallado culpable, podría ser condenado a cadena perpetua. Rob Heroy, un abogado de Carolina del Norte que defendió a otro narcotraficante mexicano, dijo a la AFP que el proceso costará “más de 50 millones de dólares” y podría ser “el más caro de la historia de Estados Unidos”.