Murió el pemón Onésimo Fernández herido hace un año en la masacre de Kumarakapay

Murió el pemón Onésimo Fernández herido hace un año en la masacre de Kumarakapay

El indígena pemón, Onésimo Fernández, uno de los heridos de mayor gravedad en el ataque militar del 22 de febrero de 2019 contra la comunidad de Kumarakapay, murió en la noche de este martes 10 de marzo en el Hospital Rosario Vera Zurita de Santa Elena de Uairén, en el municipio Gran Sabana, al sur de Bolívar.

Por María Ramírez Cabello / correodelcaroni.com





Fernández fue hospitalizado el domingo 23 de febrero, un día después de cumplirse un año del ataque de fuerzas militares a su comunidad en 2019. El traslado fue motivado por el deterioro de su salud, la infección de una escara e intensos dolores ocasionados por la lesión en la médula espinal que lo sumió desde hace un año en la paraplejia.

El disparo causó una lesión de la médula espinal y fractura osteolítica de la vértebra L5 | Fotos María Ramírez Cabello | Archivo

 

El indígena pemón fue herido un día antes de la esperada entrada de ayuda humanitaria por la frontera con Brasil. Eran las 6:00 de la madrugada de ese viernes. Kumarakapay había manifestado, días antes, su respaldo al ingreso de la ayuda, coordinado por el presidente Juan Guaidó. Luego del paso de tres convoyes militares y el inicio de disparos por parte de uniformados militares, a Fernández lo hirieron primero con un perdigón. “Me aguanté”, recordó durante una entrevista a finales de enero de este año.

“Después, cuando mataron a una señora (Zoraida Rodríguez), yo fui a verla, allí me dispararon, al esposo también le dispararon por la espalda”, dijo en alusión a Zoraida y su esposo Rolando García, dos de las siete víctimas de los ataques violentos que ocurrieron desde el 22 de febrero en territorio pemón.

Los militares descendieron de los convoyes, luego de que los habitantes de Kumarakapay detuvieran a un vehículo militar que venía detrás. Aunque hubo un intento de mediación por parte de la comunidad, los militares dispararon indiscriminadamente.

Tras el ataque, Fernández fue trasladado al Hospital General de Boa Vista, en la capital del estado brasileño de Roraima, en donde permaneció siete meses. El disparo de arma de fuego penetró el cuerpo vertebral y causó una fractura osteolítica de la vértebra L5. La herida de bala en la región toracoabdominal evolucionó con lesión gástrica y paraplejia “debido a lesión de la médula espinal y la fractura traumática por proyectil”.

Cuando Fernández fue hospitalizado a finales de febrero de este año, su deterioro fue indetenible. El dolor se acentuó. Pese a los aportes de varias organizaciones y la colecta de recursos de los habitantes de Kumarakapay, dejó de comer y hablar. Sus hermanas y su madre lo acompañaban este martes en el hospital cuando murió pasadas las 6:00 de la tarde. “No hay nada que hacer, amaneció muy mal y solo está funcionando su corazón”, informó horas antes su hermana Yelitza Fernández.

El hombre de 49 años, artesano y agricultor, es la octava víctima de los ataques cometidos por fuerzas militares y civiles armados contra Kumarakapay y Santa Elena de Uairén entre el 22 y el 28 de febrero de 2019, en el marco del ingreso de la ayuda humanitaria, y la quinta víctima del pueblo pemón. En Kumarakapay también fueron asesinados Zoraida Rodríguez, su esposo Rolando García y Kliber Pérez, los dos últimos guías turísticos del tepuy Roraima, una de las maravillas naturales del sur de Bolívar.

La representación diplomática de Juan Guaidó en Brasil se solidarizó con el pueblo pemón a través de su cuenta en Twitter. “Lamentamos profundamente la muerte de Onésimo Fernández, un luchador pemón, víctima del ataque a Kumarakapay en febrero de 2019. Estuvimos con él en varias ocasiones mientras estuvo en Brasil. Nuestro abrazo solidario a sus familiares y a toda la comunidad pemón”.

Correo del Caroní publicó el 22 de febrero el especial #UnAñoDelAsaltoAlPuebloPemón en el que se relata la historia del pemón Onésimo Fernández, cuya familia espera ahora por recursos económicos para cubrir los gastos fúnebres y de traslado hasta la comunidad indígena de Kumarakapay.

Fernández estaba postrado en cama, desde el retorno de Brasil a Kumarakapay