El presidente Trump dice que se demoró en castigar a China por su internamiento forzado de uigures en campos de detención masiva el año pasado para evitar poner en peligro las negociaciones comerciales en curso.
El comandante en jefe hizo la admisión en una entrevista con Axios publicada el domingo, luego de que le preguntaran por qué aún no había sancionado a los funcionarios o entidades del Partido Comunista Chino involucrados en la detención de personas musulmanas.
“Bueno, estábamos en medio de un importante acuerdo comercial, e hice un gran negocio, compras por valor de $ 250 mil millones. Y por cierto, están comprando mucho, probablemente lo hayas visto “, dijo Trump al medio de comunicación.
“Y cuando estás en medio de una negociación y de repente comienzas a aplicar sanciones adicionales, hemos hecho mucho”, continuó el presidente, “impongo aranceles a China, que son mucho peores que cualquier otro”. sanción que se te ocurra.
Trump firmó la primera fase del acuerdo con China en enero, poniendo fin a una amarga guerra comercial entre los dos países que tuvo lugar en medio de tensas negociaciones.
En los meses posteriores, la relación se ha debilitado ya que la nación comunista se ha enfrentado a una ola de escrutinio internacional por su falta de transparencia al inicio del brote de coronavirus.
Los comentarios de Trump se producen después de una semana de titulares sobre las acusaciones de su ex asesor de seguridad nacional, John Bolton, quien está promocionando su nuevo libro revelador, “La habitación donde sucedió: una memoria de la Casa Blanca”, que saldrá el martes.
En sus memorias, Bolton hace la afirmación explosiva de que el presidente expresó su aprobación para los campos de concentración en dos ocasiones.
Una de esas ocasiones, según extractos del libro de Bolton que se han publicado hasta ahora, se produjo durante la reunión del G20 de 2019.
Bolton alega que Trump y el presidente chino, Xi Jinping, discutieron la construcción de campos de China para detener por la fuerza a los uigures y otras minorías musulmanas.
“Según nuestro intérprete, Trump dijo que Xi debería continuar con la construcción de los campamentos, lo que pensó que era exactamente lo que debía hacer”, escribió Bolton.
El segundo llegó durante un viaje de 2017 a la nación comunista.
Bolton escribe en las memorias que Matt Pottinger, un funcionario de la Casa Blanca que aún está en servicio, ahora asesor adjunto de seguridad nacional, le dijo que Trump había aprobado los campamentos.
En declaraciones a Axios, Trump también señaló su firma de legislación el miércoles pasado que autoriza sanciones contra los funcionarios chinos responsables de esas violaciones de derechos humanos.
En una rara muestra de unidad en Capitol Hill, la Cámara de Representantes aprobó la legislación 413-1 el mes pasado y el Senado la aprobó por unanimidad.
El presidente ha negado cualquier acusación de haber aprobado los campos.
El miércoles, Trump llamó a Bolton “mentiroso”, al Wall Street Journal , diciendo que “todos en la Casa Blanca odiaban a John Bolton”, en respuesta a sus afirmaciones sobre los uigures.
Su administración pasó la última semana involucrada en una batalla legal con el editor de libros de Bolton Simon & Schuster en un esfuerzo por bloquear la publicación del libro.
El esfuerzo fue bloqueado por un juez federal, quien argumentó que la publicación del libro sería demasiado difícil de bloquear ya que al menos 200,000 copias ya habían sido distribuidas.