¿Cuál es la situación de Afganistán antes de la visita de su presidente a Washington?

¿Cuál es la situación de Afganistán antes de la visita de su presidente a Washington?

Presidente afgano Ashraf Ghani

 

 

El presidente afgano Ashraf Ghani visitará la Casa Blanca el viernes, en momentos en que los talibanes obtienen enormes avances militares en el terreno.





Algunos temen que las fuerzas gubernamentales afganas se vean desbordadas por los insurgentes cuando termine la retirada de las tropas estadounidenses el 11 de septiembre. Mientras tanto, las conversaciones de paz entre los talibanes y el gobierno en Doha siguen estancadas.

 

– ¿Cuál es la situación militar? –

 

Con la aceleración de la retirada estadounidense, los talibanes han hecho importantes avances militares y afirman haber tomado el control de 80 de los 421 distritos afganos.

Esta semana se apoderaron del puesto fronterizo de Shir Khan Bandar (norte), la principal ruta de salida de Afganistán hacia Tayikistán, clave en las relaciones económicas con Asia central.

Los talibanes acusan a las fuerzas afganas de deponer las armas o abandonar sus puestos sin combatir. Para el gobierno, es un retiro táctico de posiciones aisladas para centrarse en lugares estratégicos. Pero incluso cuando entran en combate, el ejército afgano sufre a veces grandes bajas.

Ante el avance de los insurgentes, Ghani remplazó la semana pasada a sus ministros del Interior y de Defensa. Pero para muchos analistas se está quedando sin opciones.

Eso no significa que inevitablemente los talibanes tomarán el control del país. Si el ejército es bien dirigido, puede resistir en los principales centros urbanos.

“Los talibanes refuerzan su control en torno a las grandes ciudades. Pero no necesariamente van a intentar tomar estas ciudades en un futuro próximo. La caída de Kabul no es inminente. Los talibanes no son una aplanadora invencible”, opina Andrew Watkins, experto del International Crisis Group.

 

– ¿Cual es la situación política? –

 

Allegados al gobierno describen a un presidente cada vez más desconectado de la realidad, aislado en el palacio presidencial y sin muchos amigos.

“Solo escucha a tres o cuatro personas, entre ellas al jefe del gabinete, su consejero de seguridad nacional y, por supuesto, a su esposa”, asegura, bajo anonimato, un diplomático occidental, quien agrega que Ghani “desconfía de todo el mundo”.

El presidente afgano espera convencer a los talibanes de aceptar un papel en el gobierno interino de unión nacional, que debe preparar el terreno para las elecciones.

Pero los insurgentes, animados por sus éxitos militares, no parecen tener intención de seguir negociando. Pretenden recuperar el control del país e imponer el mismo régimen fundamentalista que cuando gobernaron entre 1996 y 2001.

Recientemente aseguraron que preservarían “los derechos de todos los ciudadanos, hombres y mujeres, a la luz de los preceptos del Islam y las tradiciones de la sociedad afgana”.

Pero su conservadurismo asusta a ciertos sectores de la sociedad. “Hay motivos para creer que incluso pudieron radicalizarse más con los años por combatir a tropas extranjeras no musulmanas”, dijo el analista afgano Sayed Naser Mosawi.

“Los esfuerzos de los talibanes por presentarse como una fuerza eficaz capaz de gobernar Afganistán y conceder derechos a las mujeres y a las minorías no es más que una farsa”, afirmó.

 

– Qué piensan los afganos? –

 

Los afganos que pueden buscan dejar el país y muchos altos funcionarios ya enviaron a su familia al extranjero, sobre todo a Turquía.

Estados Unidos y otros países de la OTAN tratan de dar visas a los afganos que han trabajado para ellos, temiendo que los talibanes los consideren traidores.

Los talibanes afirman que no serán molestados si se arrepienten, y dicen estar dispuestos a garantizar la seguridad de los diplomáticos y los trabajadores humanitarios.

Pero el mundo aún recuerda su brutal comportamiento cuando tomaron Kabul en 1996 y no confía en ellos.

Muchos afganos solo sueñan con el fin de décadas de guerra. “Todo el mundo quiere la paz. La mayoría de los afganos nunca han tenido la oportunidad de vivir en paz”, dice Mary Akrami, directora de la Red de Mujeres Afganas.

AFP