La administración de Biden enfrenta llamadas para cerrar una “instalación de procesamiento” improvisada debajo de un puente de Texas después de que la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles criticó el “corral inhumano al aire libre” que alberga a miles de inmigrantes ilegales.
Por New York Post
La Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos ha estado procesando inmigrantes ilegales, principalmente familias con niños pequeños, en la instalación temporal al aire libre debajo del Puente Anzalduas en Mission durante varios meses.
Pero la semana pasada surgieron imágenes impactantes que mostraban a casi mil inmigrantes detenidos debajo del puente después de cruzar ilegalmente la frontera.
La ACLU pidió el lunes a la administración de Biden que cierre el “centro de detención inhumano”.
Describieron la instalación como un “tramo de grava y parcelas de césped debajo de una carretera internacional” y dijeron que pone en peligro la salud y la seguridad de los migrantes detenidos allí.
“Es por eso que pedimos a la administración de Biden que cierre inmediatamente el sitio e implemente medidas de supervisión para garantizar que la Patrulla Fronteriza ya no retenga a nadie en condiciones tan inhumanas”, dijeron.
La ACLU dijo que recorrió el sitio del Puente Anzalduas en junio y afirma que los migrantes estaban retenidos al aire libre a temperaturas de 90 grados con “enfriamiento inadecuado”.
“Los vimos retenidos en un área con bancos duros y grava como los únicos lugares para descansar o dormir”, dijo la ACLU.
Julio Cortez / AP
La principal representante republicana, Elise Stefanik, calificó la semana pasada al sitio como una “catástrofe absoluta” para la administración Biden después de que aparecieran las imágenes de los migrantes apiñados debajo del puente.
El video del dron fue publicado por Bill Melugin de Fox News con la leyenda: “Este es el grupo más grande de migrantes que hemos visto retenidos por la Patrulla Fronteriza bajo el Puente Anzalduas en Mission, TX. Parece que podría haber hasta 1.000 personas. Solo podemos echar un vistazo a la zona con nuestro dron. Cerca hay una popular zona de cruce de Río Grande “.
La Casa Blanca continúa enfrentando presión sobre cómo lidiar con la crisis fronteriza dada la afluencia récord de inmigrantes ilegales desde que Biden asumió el cargo.
Más recientemente, la administración está lidiando con el creciente número de inmigrantes ilegales que dan positivo por COVID-19.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, firmó órdenes ejecutivas la semana pasada que ordenan a las tropas de la Guardia Nacional estatal que ayuden con los arrestos de inmigrantes ilegales y que permitan a los policías estatales detener vehículos sospechosos de transportar inmigrantes ilegales.
Los policías pueden detener vehículos “bajo sospecha razonable” y pueden desviarlos a su punto de origen o incautarlos si se descubre que transportan inmigrantes ilegales.
El procurador general Merrick Garland, sin embargo, presentó una demanda para bloquear la orden de transporte de Abbott, calificándola de “peligrosa” y “contraria a la ley federal”.