No cualquier insecto que vuele cerca de nosotros en este momento es peligroso, aunque pensemos que sí al estar en alerta por el mosquito Aedes Aegypti, transmisor del dengue.
Por Infobae
Uno de esos insectos no tan peligrosos, son unas pequeñas mosquitas, sobre todo en la cocina, que no paran de sobrevolar o posarse en las paredes. Son las molestas mosquitas de la fruta, que en el verano o los meses cálidos se transforman en una plaga difícil de combatir.
¿Qué son las moscas de la fruta?
El nombre científico de la mosca de la fruta es Drosophila melanogaster. La palabra “drosophila” significa amante del rocío. La especie necesita acceso a abundante agua para sobrevivir.
La doctora Jody Green, miembro de la Sociedad Entomológica de Estados Unidos, se especializa en entomología urbana e industrial o, en sus palabras, “los insectos que la gente más ama odiar”.
“Las moscas de la fruta provienen del exterior de su hogar y entran de múltiples maneras. Lo más común es que entren volando en las casas cuando se deja una puerta o ventana abierta e incluso viajan en frutas o productos que se traen del supermercado. No aparecen mágicamente como la mayoría de la gente cree. Y hasta se las puede hallar en la casa cuando se tiene alimentos fermentando”, afirmó Green.
Según la experta, las moscas de la fruta adultas se encuentran comúnmente como plagas en las cocinas y en los alimentos que se dejan en un área no refrigerada. Un brote ocurre cuando una mosca adulta de la fruta encuentra una fuente de alimento y un lugar para poner huevos.
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