Este martes 25 de junio, la pomposa reinauguración del Hospital Dr. Alfredo Machado, conocido como “El Hospitalito” en Catia la Mar, quedó marcada por la escasa asistencia y un toque de comedia digna de un episodio de “Radio Rochela”.
Por Corresponsalía lapatilla.com
A pesar de los esfuerzos del régimen de Nicolás Maduro por llenar las calles con fervor revolucionario, la realidad fue un desfile de motos vacías y promesas incumplidas que dejaron a todos preguntándose: “¿Dónde están los reales?”.
Desde tempranas horas de la mañana, los organizadores del evento desplegaron una estrategia digna de una película de comedia barata.
Según un audio que llegó a nuestra redacción de una fuente muy confiable, el plan era sencillo: atraer a los motorizados con la jugosa oferta de 20 dólares “por cabeza” para asistir al acto de reinauguración. Sin embargo, cuando los motorizados llegaron al sitio, la historia cambió y la paga se redujo a la mitad. “¡Solo están dando 10 dólares!”, fue el murmullo que se escuchaba entre los asistentes decepcionados.
El espectáculo no terminó ahí.
En las calles de La Guaira se conoció que algunos organizadores se toparon con una realidad aún más contundente: varios motorizados, a quienes también se les ofreció participar en el evento, decidieron declinar la oferta.
Al final del día, la reinauguración del “Hospitalito” se convirtió en un reflejo más de la desconexión entre el régimen y el pueblo. Mientras Maduro y su séquito se esforzaban por mostrar una imagen de apoyo popular, la realidad de la escasa asistencia dejó en evidencia que ni con incentivos monetarios pueden lograrlo.
Los pocos asistentes que se presentaron al evento lo hicieron más por curiosidad que por convicción. “¡Vine a ver el show y me quedé por el chisme!”, exclamó una vecina de Catia la Mar, que observaba desde la acera.
Con la misma que llegó, se fue
En un evento que estaba pautado para las 11:00 de la mañana, fue aproximadamente a las 2:30 de la tarde que el líder del chavismo llegó al lugar y dejó a varios con “los crespos hechos” porque no brindó discurso alguno en la tarima que se había dispuesto en el lugar.
“No duró ni 15 minutos aquí”, expresó una vecina del lugar.
Y así concluyó un evento que pretendía ser un hito revolucionario, pero terminó siendo un recordatorio de que la realidad supera la ficción.
La reinauguración del Hospital Dr. Alfredo Machado, en lugar de ser un símbolo de triunfo, se convirtió en un testimonio de la desesperación y la falta de credibilidad que enfrenta el régimen de Nicolás Maduro.
Y mientras los organizadores intentan justificar el fiasco, la pregunta sigue en el aire: “¿Dónde están los reales?” La respuesta, como el apoyo popular, sigue siendo un misterio.