Cómo viven los asilados venezolanos en la embajada argentina: estuvieron sin luz, aislados y con restricción política

Cómo viven los asilados venezolanos en la embajada argentina: estuvieron sin luz, aislados y con restricción política

Disidentes. Claudia Macero (i), Pedro Uchurrurtu (c) y Magalli Meda, asilados en la residencia del embajador de Argentina.

 

La situación de los seis asilados colaboradores de la líder opositora María Corina Machado que fueron asilados en la embajada argentina en Caracas tomó un giro drástico tras la decisión del régimen de Nicolás Maduro de expulsar al cuerpo diplomático argentino.

Por: Clarín





Tras el izamiento en dicha sede de la bandera de Brasil, ese país cuida los intereses de Argentina, pero también exige para los seis disidentes determinadas pautas de conducta. Concretamente, que no hagan política mientras estén a resguardo del gobierno de Lula, como lo hacían antes de la partida de los diplomáticos argentinos.

Por otra parte, luego de que el gobierno de Javier Milei decidiera la semana pasada oficializar a través de la Cancillería que reconoce al opositor Edmundo González Urrutia como ganador de las elecciones presidenciales de Venezuela, las relaciones con el chavismo tomaron un curso de efectiva ruptura diplomática. Y la situación de los seis refugiados por este país quedó en el limbo y sin poder resolverse ahora. Un problema.

Diez días después de que Argentina cerrara su sede en Venezuela, los seis opositores viven bajo un clima de tensión y aislamiento, con una provisión irregular de electricidad y un resguardo que parece seguro porque lo tomó Brasil pero es inestable.

Por pedido del gobierno de Lula da Silva, el régimen le devolvió la luz a la residencia argentina este viernes. Se la había cortado a pocas horas de los comicios en que Maduro se proclamó ganador y Javier Milei no lo reconoció. También le retiraron las patrullas chavistas que la asediaban desde entonces.

Clarín pudo reconstruir la situación del grupo a través de distintas fuentes vinculadas a Venezuela, Argentina y Brasil, que seguirá resguardándolos pero no los asilará. Por eso, se seguirá insistiendo con que Maduro los deje salir hacia la Argentina o que uno o varios países los asile.

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